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Niñas y mujeres en contenidos infantiles

En nuestra sociedad circularon -y aún circulan con fuerza- estereotipos de género que se asocian fuertemente a lo femenino y a lo masculino de manera diferenciada y moldean las ideas sobre las actitudes, obligaciones, comportamientos y privilegios de los hombres y de las mujeres.

Históricamente, los contenidos dirigidos a las audiencias infantiles estuvieron también influenciados por esos estereotipos. Las generaciones anteriores veían con naturalidad ciertos contenidos que hoy despertarían gran rechazo.  Y no sólo en las generaciones de los y las abuelos/as, sino incluso en las generaciones de los padres y madres de niños y niñas que hoy cuestionan esas construcciones.

Popeye: «Las mujeres no deben conducir» .

Hemos avanzado bastante en cuestionar y contrarrestar esos estereotipos como sociedad. La recepción crítica de medios, el debate respecto a la discriminación que padecen las mujeres en todos los ámbitos, los movimientos que reivindican los derechos de las mujeres y que han empoderado especialmente a las adolescentes han contribuido de manera significativa con esos avances. Hoy los propios chicos y chicas cuestionan los estereotipos que circulan en los medios y en los productos de consumo cultural.

La Peluca de Lucca

Y si bien, cada vez que circulan las voces de los chicos y chicas sobre este tema, los adultos escuchamos entre asombrados y emocionados, deberíamos empezar a pensar de qué modo acompañamos esos procesos de manera más consciente, respetuosa y constructiva y que logre superar y trascender las reacciones iniciales de emoción.

Eso implicaría empezar a comprender, finalmente, que las voces de chicos y chicas son aportes a la construcción de la vida en común, que no podemos pensarnos como sociedad si no las tomamos en consideración de manera seria.

Sin embargo, la violencia de género en todas sus formas sigue siendo una de las principales amenazas para la educación, la salud y la seguridad de las niñas y adolescentes.  Contrarrestar estereotipos y construcciones de sentido que asignan roles y comportamientos a las niñas y a los niños es también una manera de avanzar en la eliminación de la violencia de género.

Hacia nuevas miradas

En los últimos años la TV infantil ha dado muestras de que, aunque le cuesta, muchas veces es capaz de ofrecer historias y personajes que se alejan de los estereotipos y roles habituales, y que instalan cuestionamientos, preguntas o simplemente la posibilidad de promover nuevas posibilidades de identificación para niños y niñas, roles, actitudes y comportamientos que alientan la diversidad y el respeto por las mujeres.

Los que siguen son algunos ejemplos de series de todo el mundo que hacen un aporte a la ruptura de los estereotipos.

– Medialuna.

– Dra juguetes

https://www.youtube.com/watch?v=-5HLczyN71k

– Genji.

-Ana Pirata.

https://www.youtube.com/watch?v=KcSq9gvxcac

– 6 pasos para:

https://vimeo.com/191570622

-Brillante:

¿Qué podemos hacer?

Está claro que, cuando hablamos de contenidos audiovisuales y otros consumos culturales para público infantil hay una fuerte responsabilidad de los creadores, productores y de la industria en general en qué tipo de productos y contenidos ofrecen.

Desde este Blog varias notas han sido publicadas con recomendaciones y sugerencias para incluir enfoque de género en la Tv infantil. (https://latinlab.org/2017/05/03/modelos-de-ninas-para-mirar-y-pensar/, https://latinlab.org/2016/03/08/como-incluir-enfoque-de-genero-en-la-tv-infantil/, https://latinlab.org/2013/12/11/el-genero-de-los-juguetes)

Por otro lado, el Estado a través del sistema educativo tiene la obligación de garantizar el acceso a la Educación Sexual Integral que tiene un lugar fundamental en la tarea de deconstrucción de estereotipos.

Sin embargo también los padres, madres y adultos que comparten la crianza de chica y chicos tienen la posibilidad de alentar en ellos una mirada crítica que pueda cuestionar lo que ve. Si bien es cierto que, la mayoría de las veces los chicos ven TV o videos en distintos dispositivos sin sus padres al lado, hay algunas sugerencias que pueden ayudar en esta tarea:

  • Contar personajes.  Cuando los chicos están viendo TV o videos podemos preguntar:  ¿Cuántos son mujeres? ¿Cuántos son hombres? ¿Los protagonistas son hombres o mujeres? Son preguntas sencillas pero que alientan la conversación y sobre todo la posibilidad de no dar por sentado roles y estereotipos.
  • Buscar alternativas. Ofrecer a los chicos otras series, videos, contenidos que vayan en contra de los estereotipos. Por ejemplo, algunos de los que mencionamos más arriba.
  • Conversar y cuestionar sobre lo que están viendo. Dependiendo de la edad de los chicos, se puede hablar con ellos acerca de los estereotipos comunes y preguntarles qué piensan. Cuando los chicos son más chicos es muy útil usar ejemplos del mundo real para mostrar que las representaciones en los medios no son reales.
  • Hablar acerca de las redes sociales. Reconocer los estereotipos negativos en las redes sociales. Por ejemplo, cuando un grupo está atacando a un género o raza, asegúrate de que tus hijos no continúen o apoyen este tipo de acciones en sus propias redes.
  • Hablar acerca del humor en los estereotipos. Los estereotipos pueden también ser humorísticos, aún los que describen nuestros propios amigos y familias, que​también se pueden convertir en personajes desagradables de forma muy rápida. Para los niños y adultos, puede ser difícil determinar cuándo un chiste basado en un estereotipo está reflejando a un grupo de manera injusta.
  • Encontrar momentos para ver y jugar con ellos aquellos contenidos que puedan ser más provocadores e intentar explicarles. 

Por Valeria Dotro y Cielo Salviolo